jueves, 2 de octubre de 2008

Be stone, my friend.

Hoy presentaremos un espectacular concepto que podría englobar toda una filosofía de vida, algo así como el "be Water" de Bruce lee o la escena de la bolsa de American Beauty. Si lo piensas bien, este concepto puede cambiar tu forma de ver el mundo. Procedo a relatar.

Nuestro pensador es un filósofo y poeta de reconocido prestigio. Para preservar su identidad le llamaremos Manolo. Tiene seis años y muchas cualidades, pero una de ellas no es bailar.

Un día, su maestra le preguntó:

- ¿Manolo, a ti que te parece que hagamos un baile por Navidad para los padres?.

Manolo vaciló un momento y se rascó pensativo la frente. Al poco rato respondió:

- ¿Puedo ser piedra?.

6 comentarios:

Esperanza Lineros dijo...

A lo que su maestra respondió.... ¿por qué? Y él, volviendo a rascarse la frente, añadió... "también puedo ser tronco", moviendo levemente, de forma casi imperceptible los bracitos a modo de ramas.

Ivan dijo...

Además de filosofía, tambien aporta una lección de cómo no responder directamente a preguntas comprometedoras.

Gracias por el aporte anónimo, Espe.

El protestón dijo...

Mi puto ídolo el Manolito ese.

Esperanza Lineros dijo...

Pues Jose, ¡tengo a varios como este!, a cual mejor... y lo que más mola es que les sale espontáneo.

Esperanza Lineros dijo...

...Por cierto Iván... la respuesta sigue siendo "no". No puedes ser piedra en la boda de Rosi.

Ivan dijo...

¿Y tronco? ¿Puedo ser tronco entonces?